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Iglesias que se fortalecen con Tiempo con Dios
Pastor Jung
Kwi-seok, quien
exige un tiempo
devocional
constante,
compartiendo y
haciendo crecer
la espiritualidad
que avanza junto
a la Iglesia.
sentimos el reavivamiento que vertió en nosotros como agua.
También vivimos la incesante gracia de Dios, mientras cons-
truíamos este templo en marzo del 2008. Y a medida que pa-
saba por cada una de estas etapas, experimenté Su gracia que
me dio una gran visión y coraje, y me abrió el camino”. Y con-
tinúa: “Recibí los tesoros de Dios que se hallan en medio de la
aflicción, pasando momentos de sufrimiento por haber fun-
dado una Iglesia sin preparación. Y viví la presencia de Dios,
quien acompaña a quien pasa por una complicada etapa. Pe-
ro la fuerza para superar aquellas dificultades en mi vida y en
el ministerio están en el tiempo devocional”. El pastor Jung,
que comenzó a hacer su TcD desde la universidad, ya lleva
diez años guiando el culto matutino con el tiempo devocio-
nal y superó miles de fracasos y problemas financieros tras la
construcción de la Iglesia, gracias a él.
Y explica: “Empezamos a incorporar el tiempo devocio-
nal por completo en el 2014, porque pensé que si el fiel logra
quedar atrapado en la Palabra de Dios, por medio del devo-
cional, entonces puede crecer como un fiel y obediente cris-
tiano ante Dios. La Iglesia necesita estar llena de gente fiel, para poder ser una
Iglesia que alegra a Dios. Este año tenemos planeado formar a los líderes a tra-
vés de una capacitación de tiempo devocional; y todos los fieles serán desafia-
dos a meditar más en el TcD, por medio del culto”.
La armonía de la unidad que nace del tiempo devocional
El pastor Jung nos presenta el sistema de ministerio del tiempo devocional: “Lo
más importante es hacer el tiempo devocional con constancia. Se necesita un es-
fuerzo enorme para incorporarlo a nuestros hábitos. Y en medio de ese esmero
se encuentra la reunión para compartir el devocional. Nosotros realizamos los
cultos como reuniones de tiempo devocional, porque al meditar la Palabra reu-
nidos, no caemos en errores teológicos, mostramos la influencia de la Palabra; y
también necesitamos hacer crecer la espiritualidad que avanza junto a la Iglesia”.
Las reuniones comienzan a partir de las “reuniones para pastores” que son
los martes. Allí se reúne el pastor junto a otros once líderes de diferentes minis-
terios y comparten sus tiempos devocionales. Los miércoles están las “reunio-
nes para líderes”, donde el pastor de un ministerio se reúne con los líderes de
su ministerio; y los viernes tienen la “reunión de tiempo devocional para célu-
las”, donde lo comparten en pequeños grupos. Todos los encuentros comien-
zan con una alabanza y oración, comparten el pasaje del día y cómo pasaron la
semana, y luego oran todos juntos por las peticiones de los demás y comparten
sus meditaciones. Es en aquel momento cuando utilizan el “Estudio bíblico se-
manal” del TcD.
Sus reuniones para compartir el tiempo devocional se caracterizan por sus
oraciones, que están unidas íntimamente. Los líderes transmiten los temas de
o­ración de los fieles a los pastores de cada ministerio y ellos lo comunican al